Un seguro de vida no es solo un trámite financiero. Es una decisión que protege a quienes más amas y garantiza estabilidad en momentos importantes. A lo largo de tu vida, hay etapas donde contar con una póliza puede marcar una gran diferencia.
Momentos donde necesitas una póliza de vida
Cuando tienes hijos
Sí, convertirte en mamá o papá cambia tu mundo. Va más allá de un cambio en tu rutina y en tu manera de ver el mundo, cambian tus prioridades y necesidades financieras.
Tener un seguro de vida te permite asegurar el bienestar de tus hijos, aun cuando tú no estés. Con una póliza adecuada, garantizas que tendrán recursos para cubrir sus necesidades básicas, educación y un futuro digno.
Consejo: contrátalo antes de que el bebé nazca y eres joven, así podrás optar por mejores condiciones. Echa un vistazo a la importancia de tener un seguro de vida y ahorro si eres padre o madre.
Y si eres madre soltera, la urgencia de contratarlo es aún mayor.
Cuando te casas o formas una familia
El matrimonio o la convivencia es también un compromiso financiero. Tener un seguro de vida significa que tu pareja no quedará desprotegida si llegara a pasar algo inesperado.
Además, si ambos trabajan, pueden contratar seguros cruzados que se complementen y se adapten a sus ingresos y al estilo de vida que tengan.
Incluso pueden llegar a tener más de un seguro de vida contratado.
Si emprendes un negocio
Ser emprendedor implica asumir riesgos. Uno de ellos es que tu familia o tus socios dependan de ti económicamente.
Un seguro de vida con de ahorro te ayudará a proteger a tus seres queridos y además, acumular capital que puedes usar para reinvertir en tu negocio.
Incluso puedes designar como beneficiario a tu empresa o establecer cláusulas para cubrir deudas pendientes en caso de fallecimiento. Estas condiciones dependerán de la póliza que contrates.
Cuando cuidas a tus padres
En muchas familias ecuatorianas, los hijos terminan siendo el respaldo de sus padres mayores.
Tener un seguro de vida es una forma de asegurar el apoyo económico que ellos podrían necesitar, sobre todo si dependen de ti para gastos médicos o sustento.
Protegerlos también es una forma de honrar todo lo que hicieron por ti.
Al acercarte a la jubilación
A esta altura de la vida, un seguro de vida con ahorro se convierte en una herramienta doble: te protege y te permite planificar un retiro con tranquilidad.
Además, puede ser un respaldo para dejar un legado a tus hijos o nietos, sin afectar el dinero destinado a tu retiro.
Si ya tienes una póliza, es buen momento para revisar si se adapta a tus nuevas metas financieras.
Consejo: si esta es tu meta, lo ideal es que lo contrates siendo más joven, para que cuando llegues a tu edad de jubilación tengas el ahorro suficiente.
¿Estás en uno de estos momentos? Es hora de actuar
Un seguro de vida no es un lujo. Es una inversión en tu tranquilidad y la de tu familia.
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